La historia explica que un grupo de ranas caminaban por el bosque cuando dos ranas cayeron en un pozo muy profundo. Inmediatamente todas las demás ranas pensaron que no podrían salir de allí y no paraban de gritar: – ¡No podéis salir!, ¡No saltéis!, ¡Cuidado os podéis ahogar! Pero las dos ranas no hicieron caso a los comentarios de sus amigas y siguieron tratando de saltar fuera del hoyo con todas sus fuerzas. Las otras ranas seguían insistiendo que sus esfuerzos serían inútiles. Finalmente, una de las ranas puso atención a lo que las demás decían y se rindió.
No hay comentarios:
Publicar un comentario